Comiendo con una familia árabe

Falafel y Hummus
Falafel y Homus

Hace poco tuve la oportunidad de visitar a una amiga a su casa, acá en Lima y conocer a su familia. Se preguntarán que tiene de extraordinario conocer a la familia de mi amiga, pues para mí fue una gran anécdota ya que debo indicar que mi amiga y su familia tienen raíces árabes, por ende, el almuerzo de aquella vez fue comida árabe y de la tradicional (y no la que vemos en películas que pica un montón y no puedes terminar). Para empezar ese día, llegué un poco tarde ya que tuve que hacer unas cosas previas, sin embargo al entrar a la casa, el olor a curry llegó hasta la puerta de entrada y me trajo muchos recuerdos de un viaje que tuve.

La comida no tardó en llegar a la mesa y de entrada nos sirvieron Falafel, que eran unas bolitas de garbanzo triturados y mezclados con ajo y cilantro, para luego freírlos acompañado de Homus, una especie de “puré” hecho a base de garbanzos. El Falafel me gustó mucho y lo mezclé con ají para que sea más rico (foto principal).

Luego, para el segundo, me sirvieron Hojas de Parra, sin embargo lo prepararon con Hojas de Acelga que también le dio un buen sabor. También sirvieron Zapallito Italiano rellena. El relleno fue arroz árabe. Muchos creen que el arroz árabe se prepara con pasas, sin embargo el verdadero arroz árabe es arroz y fideos fritos. Nada más. A decir verdad, este plato me gustó pero no tanto ya que el sabor fue demasiado fuerte para mí (no estoy acostumbrada a estos sabores) pero no sabía mal.

Para terminar, nos sirvieron Shishbarak, una crema hecha a base de cordero y curry, servido junto a una pasta (como ravioles) con relleno de cordero. Estaba demasiado rico que tomé doble porción y pienso que debo aprender a hacerlo porque de verdad me gustó bastante.

Shishbarak
Shishbarak estaba BUENAZO

Finalmente, de postre nos sirvieron Harise, un postre hecho con sémola y servido con pecanas o almendras (en mi caso fue servido con pecanas), también muy rico y con el dulce exacto para no empalagar.

Harise
Harise

Debo admitir que mi primer encuentro con la comida árabe no fue del todo mala (excepto por la hoja de acelga) y me gustaría volver a comerla muy pronto, lógicamente, probar otros platos que no son los mencionados anteriormente.

Si ustedes han probado comida árabe anteriormente, compartan su experiencia y si no lo han hecho, los invito a hacerlo.

-Buen provecho-

2 respuestas a “Comiendo con una familia árabe”

  1. […] fui, fui con una amiga y con Yoshi (mi eterno acompañante). Mi amiga (la misma de la historia de “Almorzando con una familia árabe”) había ido varias veces a este café, por eso me dijo que este era un buen lugar para […]

  2. […] poder ir a comer a un restaurante de comida árabe, que si bien, ya había probado anteriormente en casa de una familia de descendientes árabes, la experiencia en este lugar tan placentera como la […]

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